Hoy preparo una de las tortillas que más sorprende a quien la prueba. Eso sí, tiene que ser para los que estamos locos por el queso, pues su corazón es de queso fundido. Esta tortilla de calabacín sale muy grande, es ideal para una cena rápida para toda la familia o para compartir con amigos.
En este caso estoy utilizando queso provolone colocado justo en el centro, lo que hace que el corte sea todo un espectáculo. Ésta es solo una sugerencia, pues bien puedes hacerlo con el queso de fundir que más te guste como mozzarella, gouda o masdam.
La tortilla de calabacín sin queso es ya de por sí una manera exquisita de comer esta verdura o de comer tortilla, pero si le añades el queso, se convierte en un plato más contundente que sirve de comida única. Si la tomas para cenar, la puedes acompañar de una ensalada de brotes verdes con rúcula, canónigos y berros. Si es para la comida del medio día, acompañada con pan es todo un manjar.
Tortilla de calabacín y queso
Ingredientes para 5 personas:
- Calabacín: 600 gramos que serán unos dos calabacines, que picamos en daditos pequeños. Si los calabacines son tiernos, hacemos la receta con su piel.
- Queso provolone: un queso provolone condimentado con hierbas provenzales
- Huevos: 7 huevos grandes
- Sal: al gusto
- Aceite: unas tres cucharadas
Como hacer tortilla de calabacín con queso:
1.Saltear el calabacín
En una sartén calentamos dos cucharadas de aceite a temperatura fuerte, agregamos el calabacín picado y sal a nuestro gusto. Seguidamente, salteamos el calabacín durante seis o siete minutos removiendo con frecuencia, vamos a mantener el fuego al máximo para que el calabacín quede dorado y con cuerpo, ya que de esta manera vamos a evitar que todo el agua que suelta esta verdura se quede en la sartén y quede cocido, en vez de salteado.
Cuando el calabacín está tierno, dorado y jugoso, retiramos la sartén del fuego.
2.Batir los huevos
En un bol batimos los siete huevos, a los que añadimos sal si el calabacín quedó algo soso. A continuación echamos el calabacín y mezclamos.
3.Cuajar la tortilla
En la misma sartén echamos una cucharada de aceite y calentamos a fuego fuerte, seguidamente vertemos la mezcla de huevo y removemos en el centro durante unos 30 segundos para ayudar a que cuaje mejor. Después, bajamos el fuego a temperatura media (yo lo hago en el número 5 de 9 que tiene mi vitro), colocamos el queso provolone justo en el centro y cocinamos durante unos cinco minutos o hasta que los bordes se vean ya cuajados.
Cuando los bordes tienen consistencia, damos la vuelta a la tortilla y cocinamos otros tres minutos más o hasta que esté a nuestro gusto. Con la paleta tenemos que notar que el queso está ya fundido en su interior.
4.Servir
Cuando notamos que el queso está líquido, sacamos la tortilla a un plato y servimos recién hecha para disfrutar de un queso fundido con una huevo totalmente jugoso.
Anoche preparé tu tortilla y fue un éxito total.Nos ha encantado.Muchas gracias
Me alegra mucho. Muchas gracias
El calabacín es uno de mis alimentos favoritos, ya que además de rico y saludable es de lo más versátil! una propuesta estupenda y que nos ha gustado mucho! la próxima vez la haré con un queso azul, que seguro que le va muy bien! saludos
Me alegra mucho que os haya gustado, y con el queso azul, quedará de maravilla. Un saludo