Los garbanzos fritos me parecen de los platos más ricos, bien sean de garbanzos que nos han sobrado de otra elaboración, cociéndolos con este propósito o con garbanzos de bote. Esta receta de garbanzos fritos con kale, es muy socorrida y queda muy rica.
La receta es muy sencilla de elaborar y, además, es muy rápida. El kale es una verdura que da muchísimo juego, salteado simplemente, ya queda riquísimo.
Estas hojas verdes no necesitan mucho tiempo de cocción, incluso se puede tomar crudo. Yo, lo prefiero cocinado, pero en su justa medida, no se trata de que se quede blandengue y se deshaga, mejor masticar un poquito y extraer todo su sabor.
La parte que sí es más dura y necesita su tiempo para estar a punto, es el tallo. Yo tengo por costumbre retirar los tallos y utilizarlos en elaboraciones que requieren más tiempo, como guisos de patatas y legumbres. Los tallos picados, dan muy buen sabor y aportan muchos nutrientes, así que, ¡aquí no se tira nada!
Garbanzos fritos con kale
Raciones: 4
Tiempo de preparación: 5 minutos
Tiempo de cocinado: 20
Dificultad: fácil
Ingredientes:
- 400 gr de garbanzos cocidos (200 gr secos)
- 2 cebollas, en juliana
- 2 cucharaditas de ajo y jengibre triturados
- 350 gr de kale sin tallos, en juliana
- Sal, al gusto
- 1/2 cucharadita de pimienta negra molida
- Zumo de medio limón
- Aceite de oliva
Preparamos los garbanzos fritos con kale:
Primero: En una rustidera calentamos un chorreón de aceite de oliva, a fuego medio-alto, echamos las cebollas, hacemos un hueco para echar el ajo y jengibre sobre el aceite para que se hagan bien y no se queden recocidos por el agua de la cebolla. También, puedes echar primero el ajo y el jengibre, sofreír 20 segundos y a continuación la cebolla. Pero, de esta manera, corremos 2 riesgos: que salte demasiado y que se nos queme. Salteamos la cebolla 3 minutos.
Segundo: Añadimos el kale cortado en juliana muy fina y salteamos 3 minutos sin parar de remover. En seguida, el kale mermará y se quedará con un color verde brillante.
Tercero: Echamos los garbanzos cocidos y bien escurridos, la pimienta negra molida y freímos unos 5 minutos sin parar de remover. Cuando los garbanzos se vean ya tostados, echamos el zumo de medio limón, salteamos unos segundos y servimos.