Estos repollitos son una verdura que cuando están bien cocinada, saben a gloria y no desprenden nada de malos olores. Esta receta de coles de Bruselas rehogadas es de lo más sencillo y sabrosa a tope.
Para hacer las coles de Bruselas rehogadas, no necesitamos hervirlas previamente, una vez que tenemos un buen sofrito, añadimos las coles que se cocinarán en su propio.
Esta receta de coles de Bruselas es fácil, rápida y saludable, creo que lo tiene todo a favor para hacer de ella un hábito en nuestra cocina.
Coles de Bruselas rehogadas
Ingredientes:
Coles de Bruselas: 500 gramos, limpias y enteras
Cebolla morada: 1 cebolla picada finamente
Puerro: 1 puerro, picado
Tomate frito casero: 3 cucharadas
Cominos: 1/2 cucharadita
Cúrcuma: 1 cucharadita
Sal: al gusto
Aceite de oliva
Preparamos las coles de Bruselas rehogadas:
1.Hacer un sofrito
En una rustidera templamos un chorreón de aceite de oliva, echamos los cominos y sofreímos durante unos segundos, lo justo hasta que suelten su aroma. A continuación echamos la cebolla, el puerro y sal, y sofreímos durante unos 5 minutos o hasta que las verduras estén blandas. Seguidamente añadimos la cúrcuma, que cocinamos durante un minuto, hasta que huela a cocinada.
2.Cocinar las coles
Una vez listo el sofrito, añadimos el tomate frito casero y removemos para mezclar y que coja temperatura. Por último, echamos la coles, mezclamos con el sofrito y cocinamos durante 15 o 20 minutos a fuego lento y con la tapa puesta.
Al no llevar agua ni ningún otro líquido, es importante hacerlas a fuego bajo, para que vayan cocinándose con su jugo y evitar que se agarre en el fondo. En el momento en que podemos partir las coles con la cuchara o paleta, ya están listas para servir. Si las cocemos demasiado, se quedarán muy blandas, querrán deshacerse y soltarán un fuerte olor.
3.Servir
Servimos las coles recién hechas, como entrante o como cena ligera. Si buscamos un plato más completo, podemos servirlas acompañadas de arroz blanco o quinoa cocida.